DEVOCIONALES Y PENSAMIENTOS

viernes, 3 de abril de 2015

LEVANTATE!!!... RESPLANDECE!!!

ISAIAS 60:1-2: "Levántate, resplandece; porque ha venido tu luz, y la gloria de Jehová ha nacido sobre ti. Porque he aquí que tinieblas cubrirán la tierra, y oscuridad las naciones; mas sobre ti amanecerá Jehová, y sobre ti será vista su gloria."

A nuestro derredor el mundo vive en obscuridad y tinieblas, la humanidad se pierde en la confusión, la maldad, la corrupción, el pecado, el caos, la muerte, etc. Cuando estamos en obscuridad buscamos alguna luz, algún reflejo, un haz de claridad, para que nos guíe; el Señor nos dijo: "vosotros sois la luz del mundo", el mundo necesita que los hijos de Dios RESPLANDEZCAN, alumbren.

Con estas palabras Dios está llamando en este tiempo a sus hijos, a su iglesia, es un llamado y un desafío para el pueblo de Dios.

Nos llama a "LEVANTARNOS", demasiados creyentes dormidos, apáticos, sin compromiso, muchas iglesias abocadas a la realización de sus proyectos materiales, demasiados creyentes buscando la comodidad y la "bendición material" como si el Reino de Dios solo se tratara de cosas terrenas.

La Palabra dice: "despiértate tu que duermes, levántate de los muertos y te alumbrará Cristo" Ef. 5:14

Demasiados creyentes derrotados, abatidos, cansados, desanimados, caídos, "LEVANTATE EN EL NOMBRE DE JESUS", recobra fuerzas, renueva tu espíritu en Dios,

La Palabra dice: "levantad las manos caídas y las rodillas paralizadas" Heb. 12:12

Dice el Señor: "No se enciende una luz y se pone debajo del almud, sino en lo alto para que alumbre"

Para RESPLANDECER primero debemos estar en pie, LEVANTARNOS y entonces si podremos RESPLANDECER con la luz de Dios.

Moisés RESPLANDECÍA después de estar en la Presencia de Dios, cuando salía de estar con Dios en el Tabernáculo, la Shekinah del Señor como una nube llenaba el Tabernáculo y Moisés se sumergía en esa nube, cuando salía de ahí su rostro y su piel RESPLANDECIA.

Para poder RESPLANDECER debemos entrar a la Presencia de Dios y pasar tiempo con El, como cuando cargamos el móvil, debe estar algunas horas conectado a la fuente de energía hasta que la batería es completamente recargada, así también nosotros pasando tiempo con Dios nos llenamos de la Gloria de Dios, de su Poder para RESPLANDECER.

No RESPLANDECEMOS con luz propia, somos astros obscuros, como la Luna solo puede reflejar la luz del Sol, nosotros solo podemos RESPLANDECER con la luz de Dios, pero para eso debemos exponernos a ella, debemos limpiarnos y permitir que El nos alumbre para poder reflejar esa luz al mundo.

Como luciérnagas en una noche obscura, parece que la luz es tan débil, tan pequeña, pero en medio de las tinieblas reinantes RESPLANDECE y los que quieran puedan seguirnos a los brazos del Señor.


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